Hacer cosas ridículas en pareja, hace que los lazos afectivos tomen más fuerza y esto beneficia mucho a la relación.
Esta mujer con mas 20 años de casada afirma: “Con todo el tiempo que llevamos casados mi esposo recuerda el primer peo que me tiré frente a él. La acción cambió nuestra relación para siempre. Él cuenta la historia de ese momento con mucho entusiasmo y asegura que en ese momento supo que iba a estar casado conmigo por siempre”.
Esta reconoció que la primera vez que lo hizo fue de forma accidental ya que siempre intentaba evitarlos cuando estaba junto a su pareja: “Tan pronto crucé esa línea intima le di permiso para que él se tirara todos los peos posibles delante de mí. Esto podría convertirse en una tortura en muchas ocasiones, pero lo cierto es que me da la oportunidad de apreciar mi libertad dentro de esta relación y me da licencia para ser yo misma hasta en los detalles más pequeños”.
La autora afirma que los peos son compartidos más fácilmente por los hombres pero entre las mujeres también debería ser una buena práctica: “Las mujeres tratan de ocultarlo más que los demás, pero con nuestro maridos debemos dejarlos salir sin problemas. Las invito” esta es una buena práctica para que se haga más duradera la relación.
Retener los gases o (peos) es una práctica poco saludable: “Compartir un pedo es tan normal como reír, girar la cabeza y llorar. Porque no compartirlo con la pareja”.
El Dr. Oz, experto en la materia, afirmó que biológicamente aguantar un peo causa dolores abdominales y puede desencadenar cólicos: “Es un hecho científico que las mujeres y los hombres pasan la misma cantidad de gas en un día – casi medio litro. (Se va a tener que salir en algún momento)”.
Además, resaltó que los pedos en pareja demuestran una gran confianza y un fortalecimiento de la misma: “Al fin y al cabo juraron amor en las buenas y en las malas. Haga de su matrimonio uno perdurable, constante y completo. Tenemos que ser honestos”.
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